Boda de la hija de Alejandro Fernández: Un error estropeó la llegada triunfal de la novia
Camila Fernández no pudo llegar a su boda con Francisco Barba como soñaba: en una calesa de caballos adornada con flores por un error en la planificación.
Ayer Alejandro Fernández se puso su traje de charro negro y fue el emocionado padrino de boda de la primera de sus hijas en llegar al altar: Camila Fernández se casó con Francisco Barba, el amor de su vida, a quien conoció tan solo hace alrededor de nueve meses.
Se esperaba que la novia llegara en una calesa tirada por caballos y adornada de flores, algo que sin embargo nunca llegó a suceder. La novia llegó en un coche oscuro junto a su padre y se especuló con que quizá su llegada se programó de tal forma por motivos seguridad.
Pero según aseguró el medio mexicano Publimetro, lo que pasó fue que las personas encargadas de manejar el carruaje de caballos se equivocaron de lugar y nunca llegaron a tiempo para dejar a la ilusionada novia y a su papá frente al altar.
Afortunadamente, la calesa sí llegó al templo cuando estaba terminando la ceremonia, a tiempo de la salida de los novios de la iglesia, algo que al menos logró conseguir la bella estampa de los felices recién casados a bordo del carruaje.
Después de sufrir un verdadero flechazo en una cita a ciegas, como la misma Camila dijo en una entrevista a Ventaneando, la pareja sorprendió a todo México con una íntima boda el día uno de agosto, no exenta de críticas ante la complicada pandemia de coronavirus que asola al mundo, aunque muchos medios aseguran que se llevaron a cabo todas las medidas de seguridad, como el tomar la temperatura a cada persona asistente a la ceremonia.
Fuente: People en español