top of page

Julio Sabala quiere asombrar a los centenials, proyectarse a la ‘stand up comedy’ e inmortalizar su legado artístico en internet

Julio Sabala viene a Guayaquil a presentarse y a comer cangrejo. Dice que se siente muy bien en ciudades “proclives al humor”, donde hay Costa, mar y gente “con colorcito, bullanguera, más feliz”. Asegura que aquí tiene amigos y esto le permite venir anticipadamente, ensayar, ensamblar, promocionar el show con calma y hacer algo de turismo.


“Ya me tienen la ruta del cangrejo; tengo cenas en casas de amigos; el promotor es buen anfitrión y cuento con Honorio Santistevan” (quien, además, alternará con Sabala durante los 5 espectáculos que dará en Ecuador). “Es abogado y me podrá defender ante cualquier eventualidad”, dice riendo, pero luego agrega rápidamente que es muy precavido y siempre minimiza los riesgos con su equipo, nada de maletas ni equipos perdidos un día antes de la presentación.


Le gusta tener todo bajo control y se considera un artista y empresario disciplinado. Del otro lado de su conocida faceta de humorista está la sobriedad con la que se proyecta en los negocios.


Por ejemplo, la manera en que cuida su presencia en redes y no se sobreexpone. “Si me prodigo mucho, la gente no pagará para ir a ver lo que tiene gratis su teléfono. Por eso, se cuida con celo esto que se llama el morbo taquillero; hago actividades paralelas que me mantengan vigente, pero sin lastimar el escenario”.


No significa que quiera quedarse fuera de las redes. “Bienvenidas sean. Preparamos el desarrollo de Julio Sabala Planet. Todo estará alojado en una página, lo personal, la música y el humor, para dejar un rastro de mi actividad artística a los al menos 200 millones de personas que saben que existo y me tienen bien considerado”.


“A la abuelita y a los nietos”, Julio Sabala quiere hacer reír a las nuevas generaciones

En la gira por sus 35 años de vida en los escenarios, Julio Sabala está decidido a convocar a cuatro generaciones: “la abuelita, los padres, los hijos y los nietos”. Desfilarán los personajes clásicos con el que lo conocieron los boomers y la generación X: los grandes de la balada romántica y de la música popular, Roberto Carlos, Celia Cruz, Juan Luis Guerra, José Luis Rodrígez El Puma, el actor Mario Moreno Cantinflas y aquel al que considera un modelo de artista exitoso: el español Julio Iglesias.


Pero también aparecerán caracterizaciones de estreno: los exponentes de la música urbana, y representantes de la generación milenial e ídolos de los centeniales: el puertorriqueño Bad Bunny, su compatriota Farruko, el estadounidense Romeo Santos y el colombiano Camilo. Algo Sabala que ama del público joven es que tiene intacta su capacidad de asombro. Para el artista es como si le hubiesen dado una audiencia en blanco.


¿Ha sido desafiante incorporar a celebridades jóvenes? “Lo de Maluma es más difícil, por la caracterización física”, cuenta, “pero a Bad Bunny lo tengo fácil”. Explica que la mayor exigencia con las nuevas estrellas está en el disfraz. Antes, con los clásicos, tenía que exigirse vocalmente, pero con los jóvenes no es ese el desafío, y se enfoca en el transformismo, en borrar su cara para adquirir los rasgos de otra persona, algo que jura que es más fácil con personajes femeninos que con hombres.


Una persona de su equipo lo acompaña en los cambios de ropa, pero el que interviene en el rostro es el propio Sabala. “Yo me pongo los apliques (faciales) mientras me visten”, dice, recordando que empezó a experimentar en la imitación en la adolescencia, y a los 25 se profesionalizó.


Nunca ha tenido a alguien enojado por una imitación, sostiene, porque sus recreaciones nacen de la admiración y de la observación del potencial humorístico que tiene hasta el más serio. “Se lo toman como compañeros, saben la dificultad de estar en el escenario”.


Fuente: EL UNIVERSO

Comments


Entradas Recientes
Siguenos:
  • Facebook Long Shadow
  • Twitter Long Shadow
  • Icono social Instagram
bottom of page